Como ya sabemos, una de las obsesiones que tienen las marcas a la hora de diferenciar sus teléfonos de la competencia es la de ofrecer la mayor potencia posible pero, al parecer, no todas ellas lo hacen de la forma mas lícita posible. De hecho, gracias a John Poole, uno de los desarrolladores de la conocida app de test de rendimiento denominada GeekBench, hemos podido saber que Xiaomi lleva a cabo una triquiñuela para que su puntuación en aplicaciones de este tipo sea más alta de lo que debería.
Esta información ha sido compartida a través de la cuenta oficial de Twitter del propio John, donde ha declarado que la compañía China dota a sus equipos de una herramienta a nivel de software que es capaz de detectar la aplicación que está ejecutando y, acto seguido, dotar de mayor o menor potencia al procesador y sus diferentes componentes en función de los requerimientos de la misma.
Diferentes resultados en función de la aplicación que estemos ejecutando
Tal y como explica John Poole en su experiencia, éste estaba utilizando un Xiaomi Mi 11 para diferentes pruebas de rendimiento y descubrió que las puntuaciones de GeekBench eran diferentes cuando ejecutó la versión regular de esta aplicación, al igual que con otra compilación de este software basado en el videojuego Fortnite.
Al parecer, en las pruebas de rendimiento con un sólo núcleo, las puntuaciones de este dispositivo fueron alrededor de un 30% inferiores en la versión disfrazada de GeekBench en comparación con la aplicación estándar que podemos instalar en cualquier teléfono. Y algo similar ocurre con las pruebas en multicore, donde la puntuación también mostraba un rendimiento un 15% inferior a lo habitual.
Pero esto no se quedo aquí, ya que esta compilación basada en Fortnite no fue la única en arrojar esta puntuación tan dispar, ocurriendo exactamente lo mismo en otros juegos como Genshin Impact, lo cual confirma que Xiaomi ha integrado diferentes mecanismos para detectar la aplicación que está ejecutando el sistema para ofrecer una u otra puntuación en función a las necesidades del sistema.
Por lo tanto, esta noticia puede ser un arma de doble filo ya que, o bien lo podemos interpretar como que la marca fuerza que sus teléfonos no ofrezcan la mayor potencia posible en ciertas apps para no comprometer la autonomía de los mismos, o bien podemos tomarlo por el lado de que se guarda ese extra de potencia para poder aparecer en puestos superiores en el ranking de este tipo de aplicaciones de rendimiento.
Sea como fuere, está claro que la compañía tiene el control total sobre su software a nivel de rendimiento para tareas más o menos lícitas, pero la verdad es que no es de buen gusto que se lleven a cabo este tipo de técnicas de cara a tener una mejor percepción por parte del usuario aunque, por suerte, no es un problema que se refleje en la potencia de los teléfonos en el día a día que, de forma habitual, suelen dar una experiencia fluida y sin faltas de potencia evidentes.
Fuente | John Poole