Estamos atravesando una DANA meteorológica, y eso está provocando lluvias, tormentas y una situación de temperaturas más fresca. Pero no nos engañemos: el verano sigue, y de hecho el viernes empezarán a subir los termómetros de nuevo, llegando a otra ola de calor o episodio de altas temperaturas.
Y no se vosotros, pero en mi caso, estos días de mega-calor me tienen loco en cuanto a qué hacer de comer. Por eso, y para cuando no me apetece cocinar, un gazpacho es la mejor solución. Y he aprendido a hacer una variante tan curiosa en sabor como exótica en nombre: gazpacho de sandía.
Cómo hacer gazpacho de sandía para cuando aprieta el calor
Pocas cosas hay tan tradicionales de la gastronomía española como es el gazpacho. Y pocas tan ideales para la época actual. Y esta variante que he encontrado buscando recetas fresquitas en nuestros compañeros de Directo al Paladar es ideal.
De hecho me encanta mezclar sabores y texturas, y tenía curiosidad por saber cómo combina una fruta como la sandía con algo como el gazpacho. Esta receta es simple y no se tarda más de 15 minutos en elaborarla con ayuda de una batidora Blender como la de Xiaomi, que además está casi a mitad de precio:
Xiaomi Smart Blender - Batidora de vaso con ocho cuchillas multiángulo de acero inox., modo dual caliente y frío, 9 velocidades, dial OLED, App Xiaomi Home, blanco (Versión ES + 3 años de garantía)
Ingredientes:
- 250g de sandía pelada y sin pepitas
- 250g de tomate maduro
- 1 pimiento verde italiano
- 1 diente de ajo
- 100g pan duro
- Agua
- Sal
- 15 ml de vinagre de Módena
- 30 ml de aceite de oliva virgen extra
Elaboración del gazpacho de sandía
- Lava bien los tomates y quítales la parte superior del cabo. Lava también el pimiento y quítale la cabeza y todas las semillas.
- Corta todo en trozos regulares, sin tampoco procurar que sean muy pequeños, y luego colócalos en el vaso de la batidora eléctrica.
- Pela el diente de ajo, córtalo por la mitad y quítale el germen -ese cabito que tiene en medio. Ponlo también junto a los otros en la batidora.
- Toca darle al botón: Tritura hasta obtener una masa homogénea
- Vamos con el pan duro: córtalo en trozos regulares y ponlos en un cuento con agua fría. Lo que necesitas es que se reblandezcan, lo que se logra en más o menos 10 minutos.
- Mientras esperas, trocea también la sandía. Y mira de nuevo que no tenga una sola pepita.
- A 'blendear' de nuevo: sin retirar los tomates, ajo y pimiento que has triturado antes, echa en la masa el pan escurrido -cuidado que se te puede deshacer en la mano si lo aprietas muy fuerte-, la sandía, y añade el vinagre. Y tritura de nuevo hasta conseguir la misma textura.
- Ahora viene el tema del sazonamiento: prueba la masa resultante y añádele más sal si quieres. En mi caso le añadí más sal, ajo (en polvo) y un poco de pimienta negra, que me encanta echársela al tomate.
- Cuando ya lo tengas a gusto, viene el paso definitivo que transforma esa masa en gazpacho. Toca añadirle el aceite de oliva. Y como recomiendan en Directo al Paladar, tritura a máxima potencia durante unos cinco minutos para que "el aceite emulsione con la mezcla ya triturada y le otorgue una textura cremosa".
- Como toque extra, si ha quedado demasiado espeso, añádele un poco de agua. Si ves restos de pieles o algo, pásalo por un colador para dejarlo más fino. Y cuando esté a tu gusto pleno, a la nevera varias horas, porque el gazpacho debe servirse frío.
Vía | Directo al Paladar
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