Los auriculares son uno de los accesorios imprescindibles en nuestro día a día. La mayoría de personas ya hacen uso de estos en el transporte público de camino al trabajo, mientras hacen deporte o incluso cuando estamos dando un paseo. Estos se ensucian con facilidad debido a que en los oídos se crea cera y están en constante contacto con esta. Hoy vamos a darte las claves para limpiar de una forma muy sencilla.
El interior de los auriculares: la prioridad
A pesar de que muchos son táctiles, lo cierto es que la parte en la que más suciedad se acumula por motivos obvios es la que se introduce en el interior del oído. Haciendo uso de un bastoncillo de los oídos y un poco de alcohol isopropílico podremos quitar la mayoría de suciedad.
Una vez que nos hemos deshecho de la mayor parte de la suciedad, haremos uso de una aguja esterilizada para poder ir retirando con mucho cuidado aquella cera que pueda estar tupiendo alguna salida de audio. Recordemos que también existen accesorios específicos para este tipo de limpiezas y son muy baratos, aunque como puedes apreciar también se puede hacer con cosas que tenemos por casa.
En caso de que esté recubierto por tela, lo mejor es mezclar en un bote amoniaco y agua a partes iguales y frotar con cuidado.
Cómo limpiar las almohadillas de los auriculares
Para poder hacer una limpieza profunda lo más recomendable es quitarles el adaptador de goma que cuentan la gran mayoría de auriculares. Estos suelen salir tirando suavemente. Son muy fáciles de montar e intercambiar, en el caso de que queramos buscar otros que se adapten mejor al tamaño de nuestro oído.
El panel táctil
Si los auriculares se nos han conectado nada más sacarlos de la caja, probablemente se vuelven un poco locos al pasarles el paño con un poco de limpiacristales o multiusos. No te preocupes, que no se dañan siempre y cuando solo humedezcas el paño que vas a usar y no apliques el producto directamente sobre los propios dispositivos.
