Hace solo unos días hablábamos de la nueva actualización de Android Auto. Al parecer, esta será probablemente la última que veamos antes de dar paso al nuevo diseño del sistema de infoentretenimiento de Google en nuestros coches.
Pues bien, parece que para poder hacer frente a ese futuro diseño (y al hardware que eso conlleva), Google ha elevado los requisitos mínimos necesarios para que nuestro móvil pueda conectarse a un vehículo compatible y reproducir el contenido en la pantalla.
Android 8.0 como nuevo estándar para usar Android Auto
Como se puede ver en la página de soporte de Google, la compañía ahora ha subido el listón de Android 6.0 a Android 8.0 (Oreo) para que nuestro móvil pueda ejecutar Android Auto en el coche. Hay dos posibles razones detrás de este cambio.
La primera es la propia antigüedad de Android 6.0, que salió en octubre de 2015 y cuya última versión data de 2017. Cualquier móvil con este sistema operativo que no haya actualizado tendrá, probablemente, más de tres años.
A estas alturas, son muy pocos los usuarios que tienen un móvil con Android 6.0, y subir los requisitos mínimos mejoraría la tasa de adopción de un sistema más moderno, dándole a Google mejores números en cuota de mercado.
Otro de los motivos de esta subida sería preparar el terreno para el nuevo Android Auto: CoolWalk. Se trata de una nueva versión con grandes mejoras que el gigante estadounidense está preparando para lanzar en las próximas semanas.
Esta nueva versión requiere de un hardware mucho más sofisticado, y Google da por hecho que un móvil con Android 6.0 difícilmente podría soportar la carga del nuevo diseño y sus nuevas funciones.