El Grupo Volkswagen no quiere los aranceles a las marcas chinas. Y tiene miedo de las represalias de China
Las reservas siguen creciendo en China al igual que el interés por el coche, incluso 9 meses tras su debut. El año que viene tendrá su revisión de carreras, el todopoderoso Xiaomi SU7 Ultra, a la venta. Y además hay dos nuevos coches SUV en preparación. Ahora mismo existen 6 coches en marcha en Xiaomi, y el modelo sedán original aún ni se espera en Europa.
Aranceles. Esa es la clave todo y el motivo de por qué no tenemos aún el Xiaomi SU7 en Europa. China es el mayor mercado de coches eléctricos EV del mundo. Europa demanda coches eléctricos para sus planes de futuro. China está dispuesta a ofrecérselos, pero para proteger el mercado local, la UE le impone aranceles a todos los fabricantes de EVs chinos.
Los aranceles, el problema que mantiene detenido el mercado EV de fabricantes chinos en Europa
La situación está algo tensa, aunque se están proponiendo soluciones. Una que está empezando a moverse es fabricar en suelo europeo las marcas de coches chinos, lo que no sería importación, ya que modelos como el Xiaomi SU7 se fabricarían en la zona UE, y por tanto no estarían sujetos a ningún arancel y su precio sería mucho más competitivo.
Pero esa medida no gusta al gobierno chino, porque "el país está intentando salvaguardar los secretos comerciales y mitigar potencialmente algunos riesgos regulatorios en el proceso", a pesar de que hay marcas chinas que ya están llevando a cabo esa medida, como Chery, que se está haciendo cargo de la antigua planta de Nissan en Barcelona. O SAIC, que también tiene una planta similar en Pakistán.
La idea es fabricar componentes en China y ensamblarlos en la UE. De esta forma, las marcas chinas no se enfrentarían a aranceles, y al mismo tiempo se incentivaría el trabajo local con factorías que emplearían a personal europeo.
Las represalias de China con los aranceles
Pero que se den soluciones no significa que se vayan a adoptar, al menos de momento. Y la situación sigue igual de tirante. De hecho, una de las marcas más míticas de Europa ha manifestado su preocupación: el Grupo Volkswagen, que teme las represalias de China ante los aranceles.
La decisión de subir, bajar, eliminar o mantener los aranceles ha sido votada, y la votación no ha producido el resultado esperado, así que la última palabra la tiene la Comisión Europea, que tomará la decisión final sobre los aranceles. Esto preocupa al Grupo Volkswagen, ya que la respuesta de China si la CE vota por mantener los aranceles podría ser dañina para las marcas de coches europeas.
Oliver Blume, el CEO del Grupo Volkswagen, es partidario de quitar los aranceles a las marcas EV chinas, dado las inversiones que estas marcas han hecho en la UE. El motivo es que, si al final Europa mantiene los aranceles, China podría establecer sus propios aranceles a las fabricantes europeas que quieran vender sus coches en suelo chino, lo que afectaría a marcas como Volkswagen, Audi, Porsche o Lamborghini.
Las pérdidas de las marcas europeas de coches si China establece sus propios aranceles
Y es que el CEO tiene sus motivos, ya que el mercado chino es el mercado automovilístico en que el Grupo Volkswagen obtiene más ventas de todo el mundo. Que el gobierno chino estableciese aranceles disminuiría las ventas y beneficios del Grupo Volkswagen considerablemente. Otras marcas como BMW o Mercedes-Benz tampoco quieren esos aranceles, porque hasta 1/3 de sus ventas mundiales son en China.
¿Les hará caso la CE a Volkswagen y cia y acabará quitando los aranceles? ¿Los mantendrá y China responderá con lo que Blume y otros CEOs más temen? Seguiremos atentos, pero desde luego lo que Europa tiene entre manos es una enorme patata caliente que, se decida lo que se decida, va a tener consecuencias.
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