¿Cuál es mejor, Xiaomi Mi Music o Apple Música? Ambas plataformas cuentan con dos aplicaciones preinstaladas en nuestro equipos, ambas denominadas 'Música', que sirven como los reproductores esenciales para manejar los archivos de audio del sistema: canciones y discos, pero también notas de audio o podcasts.
Con el fin de analizar qué nos gusta y qué no, qué echamos de menos y qué debería ser indispensable, hemos comparado ambas. Hemos analizado las aplicaciones 'Música' en un iPad desde la versión iPadOS 15.1, la más avanzada en la actualidad, y 'Música' en un Xiaomi Mi 11 con la ROM Global 12.5.7 y acudiendo al apk de la app, con la versión 6.1.16i-831, la más avanzada disponible en la actualidad.
Editar y configurar pistas
Dentro del editor de pistas de 'Música' —la de Xiaomi— tenemos la oportunidad de modificar cualquier metadato: nombre de la canción, del artista, del álbum, añadir letras —incluso desde un archivo .txt local—, cambiar la carátula e incorporar la canción dentro de una playlist que se componga exclusivamente por la misma canción repetida tantas veces como queramos.
También podemos convertir esa canción en el tono de llamada o tono de alarma al uso, gracias a un atajo para ello. Otro añadido muy interesante reside en la posibilidad de editar el archivo en sí mismo, cambiando su extensión a través de un editor de tiempo muy sencillo e integrado dentro de la aplicación. Por supuesto, también podemos marcarla como favorita tocando sobre el corazón de 'Me gusta' o borrar el archivo.
Dentro del menú de edición de la 'Música' de Apple podemos eliminar la pista, añadirla a una playlist, acceder al álbum al que pertenece, marcar como 'me gusta', elegir 'sugerir menos de este estilo' —el equivalente a 'no me gusta'— y poner dicha canción en la cola de reproducción, al principio o al final.
Sin embargo, todas estas opciones son de interacción directa, en ningún momento podemos modificar los metadatos de estilo y género, fecha del disco y, mucho menos, cambiar el nombre del archivo, el autor o la carátula, algo que tendremos que editar desde iTunes, desde la función 'Información de la canción'. Una limitación severa para quienes se encuentren con un archivo sin metadatos, del que no pueden reconocer la fuente original.
En cuanto a la reproducción con plugin emergente o ventana flotante, El reproductor siempre se queda activo en segundo plano e iPadOS 15 mantiene el reproductor superior y la opción de conectarse vía AirPlay, nada más.
En cuanto a Mi Music o la 'Música' de Xiaomi, la app de música cuenta con su propio reproductor —con widgets renovados— que no solo permite pausar, continuar o pasar a la siguiente o anterior canción, sino que suma la opción de favoritear la pista en curso, escucharla en bucle o reproducir cualquier momento de la misma desde tu línea del tiempo.
Música como servicio integral
Vamos ahora a analizar las apps como servicios integrales, como reproductores más allá de los archivos locales que llevamos dentro del dispositivo. La app de Xiaomi es compatible (en China) con los servicios QQ Music y NetEase Cloud Music, el equivalente a la Spotify y Amazon Music del país. También cuenta con mejoras dentro del Centro de Control.
Dentro de España, sin embargo, la aplicación está muy limitada como servicio de terceros.
Eso sí, posee una baza muy jugosa: puedes ver vídeos de Youtube y escuchar el audio, sin anuncios, sin necesidad de esperar para los saltos entre canciones, pudiendo bloquear el móvil o la pantalla. La música seguirá sonando, lo que convierte a la aplicación de Xiaomi automáticamente en el servicio con mayor cantidad de archivos musicales de todos, sin necesidad de pagar por YouTube Music Premium.
La de Apple lleva integrado todo el ecosistema de Apple Music. Esto son unos 75 millones de canciones en HD, miles de podcasts y muchas playlists exclusivas. Sin embargo, las funciones de edición y sincronización, efectos de sonido y ecualización la relegan a mero escaparate para acceder a Apple Music, mientras que la vieja iTunes sí contaba con mayores funciones de personalización y acceso a radios de todo el mundo.
Algunas conclusiones
Antes de concluir debemos apuntar a varios empates: la app de Xiaomi puede ser controlada con los botones de los auriculares, igual que la aplicación de Apple. Empate entre ambas. La calidad del audio está supeditado al chip ídem del dispositivo, sin compresión ni "alteración a través de un DAC virtual"; empate.
Ahora sí, podemos concluir que la aplicación de Apple es demasiado dependiente de su ecosistema. Al no incluir ecualizador ni funciones para escuchar música desde otras plataformas es muy endogámico.
Por ejemplo, la posibilidad de editar la duración de una canción es un añadido muy elocuente de cara a enfrentar ambas opciones. En la app de Apple estaríamos obligados a recurrir a una aplicación de terceros como Sampr, Hokusai o incluso la propia Garage Band, que incluye un completo editor de audio, heredando de manera simplificada algunas de las herramienta de la suite Logic Studio.
Sin embargo, sí se permite gestionar música ya vinculada al Mac mediante el sistema AirPlay —o recurriendo a Remote—, algo que la app de 'Música' de Xiaomi no incluye, pese a estar ante una aplicación bajo un sistema tan abierto como es Android.
En suma, Xiaomi gana por poco, por ese siempre celebrable reproductor de audio desde Youtube —que ni siquiera está disponible en todos los territorios— y por ese completo editor que recuerda a los mejores tiempos de iTunes.